Memoria largo plazo o MLP: tipos, características y como mejorarla

memoria largo plazo

La memoria a largo plazo o MLP es un mecanismo mediante el cual podemos almacenar información por un periodo prolongado de tiempo. La información almacenada en la memoria a largo plazo suelen durar más que aquellas que están almacenadas en la memoria a corto y suelen ser más fáciles de recordar. Aunque pueden verse alteradas levemente con el paso del tiempo. Aquellas memorias que se recuerdan más a menudo son mucho más profundas y más difíciles de olvidar. Además, este tipo de memoria se encarga de almacenar hechos, destrezas y conocimientos que faciliten realizar actividades de forma autónoma y sin errores, resultando esencial para la vida cotidiana.

¿Cuáles son sus características?

Las características más resaltantes de la memoria a largo plazo son las siguientes:

  • Se encuentra usualmente fuera de la conciencia:

    Aunque estos recuerdos no se encuentran constantemente en nuestra conciencia pero pueden ser evocados para ser usados cuando se necesitan. Algunos recuerdos serán más difíciles de evocar que otros.

  • No todas las memorias a largo plazo se forman de la misma manera:

    Mientras algunas memorias se adhieren rápidamente en nuestra memoria, otras requieren de más esfuerzo y del uso de recordatorios o indicaciones. Mientras más importante sea el recuerdo será más fácil de evocar.

  • Las memorias a las que frecuentemente se accede se vuelven más fuertes y más fáciles de recordar

    Acceder a las memorias una y otra vez fortalece la conexión neuronal en el cual la información es codificada facilitando la recolección de memorias. Aquellas memorias que no se recuerdan a menudo pueden llegar a desaparecer o ser reemplazada por otra información.

Tipos de memoria a largo plazo

  • Declarativa: Aquella información que podemos expresar escrita o verbalmente. Se divide en dos:
    • Memoria semántica: Conjunto de información acerca del mundo y la realidad en general. Incluye el vocabulario, los conocimientos académicos o lo que se sabe de cada concepto. Por ejemplo, tener el conocimiento de que las bananas son amarillas y necesitan ser peladas para poder comerlas.
    • Memoria episódica: La información acerca de los hechos que se han vivenciado. Por ejemplo, recordar un viaje o el lugar donde se dejó estacionado el auto.
  • No declarativa: Es aquella información que no podemos expresar verbalmente, suelen asociarse conocimientos adquiridos a través del aprendizaje. Este tipo de memoria es más resistente al daño cerebral.
  • Memoria procedimental: Es la memoria de los movimientos motores y responsable de recordar “cómo se hacen las cosas”. Esta memoria es automática y actúa de forma inconsciente. Por ejemplo: Manejar una bicicleta después de 5 años sin haber manejado alguna.
  • Memoria asociativa: Se refiere al almacenamiento y evocación de recuerdos mediante procesos asociativos. Suele responder a un proceso de condicionamiento. Por ejemplo, los escolares saben que el timbre significa que es hora de descansar.

¿Cómo se puede mejorar la memoria a largo plazo?

  • Atención: Para poder adherir una vivencia o información en la memoria a largo plazo es necesario prestarle la atención pertinente evitando las distracciones.
  • Respetar las horas de sueño: Se ha probado que dormir entre 6 a 8 horas ayuda a optimizar el proceso neuronal facilitando la fijación de los recuerdos.
  • Realizar actividad física: Realizar ejercicios o cualquier tipo de actividad física ayuda a mantener la salud de los neurotransmisores encargados de almacenar información.
  • Visualización: Imaginar o visualizar las palabras o conceptos ayudan a fortalecer las conexiones neuronales. Por ejemplo, en una clase de historia imaginarse todo los hechos o visualizarlos para poder asociar las palabras con imágenes.