¿Qué es la adicción al sexo?

adicción al sexo

Si usted o alguien a quien ama sufre de una adicción al sexo, es posible que no tenga límites saludables. Si su esposo es adicto a la pornografía o al sexo, es posible que usted se sienta alienada, aislada, deprimida, enojada o humillada y necesite tratamiento. Y si tu eres adicto al sexo, es posible que te involucres fácilmente sexual o emocionalmente con las personas, independientemente de lo bien que las conozcas.

Además, los adictos al sexo pueden alterar sus actividades para realizar actos sexuales persistentemente, sin poder controlar su comportamiento a pesar de las consecuencias. Este comportamiento sexual compulsivo puede tener graves consecuencias personales. Al igual que la adicción a las drogas o al alcohol, la adicción al sexo puede afectar la salud física, la salud mental, las relaciones personales y la calidad de vida. 

 

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¿Qué es la adicción al sexo?

La adicción al sexo se refiere a pensamientos, deseos, impulsos o comportamientos sexuales excesivos que no se pueden controlar y que causan angustia y daño a sus relaciones, finanzas y otros aspectos de su vida. Entonces, si bien los impulsos sexuales son naturales, la adicción al sexo solo se refiere a comportamientos que se realizan en exceso y que impactan significativamente en la vida de uno de manera negativa.

La adicción sexual también se llama hipersexualidad, conducta sexual compulsiva y otros nombres. Si bien no siempre se reconoce como un diagnóstico legítimo, la adicción al sexo tiene consecuencias reales. Los tratamientos incluyen medicamentos, psicoterapia y grupos de apoyo de autoayuda. 

Síntomas de la adicción al sexo

¿Cómo sabes si tú o alguien que te importa puede tener una adicción al sexo? Algunos de los signos de la adicción sexual incluyen:

  • El sexo domina la vida de la persona con exclusión de otras actividades.
  • Las actividades sexuales pueden ser inapropiadas y/o arriesgadas y pueden incluir exhibicionismo, sexo en público, sexo con prostitutas o asistencia regular a clubes sexuales.
  • La necesidad constante de tener relaciones sexuales suele estar intercalada con sentimientos de arrepentimiento, ansiedad, depresión o vergüenza.
  • La persona se involucra en otras formas de sexo cuando está sola, incluyendo sexo por teléfono, pornografía o sexo por computadora. 
  • La persona tiene relaciones sexuales con múltiples parejas y/o tiene relaciones extramatrimoniales.
  • La persona se masturba habitualmente cuando está sola.

Es importante tener en cuenta que una persona no tiene que participar en sexo extremo o “extraño” para tener una adicción. Simplemente son incapaces de detenerse a sí mismos, a pesar del daño que saben que puede resultar de su comportamiento.

De igual manera, es relevante recordar que disfrutar de la actividad sexual no es un signo de adicción al sexo. El sexo es una actividad humana saludable, y disfrutar de ella es normal. Además, las diferencias en el nivel de interés sexual entre los miembros de la pareja no significa que uno de ellos tenga una adicción al sexo.

¿Qué causa la adicción al sexo?

Hay una serie de teorías sobre por qué se produce la adicción al sexo. Algunos de estos implican conceptualizar una adicción al sexo como una forma de control de impulsos, trastorno obsesivo-compulsivo o trastorno de relación. Otra teoría es que, en algunos individuos, la adicción sexual surge como consecuencia y forma de afrontar el trauma temprano, incluido el trauma sexual.

Las personas con adicción al sexo a menudo usan el sexo como una forma de escapar de otros problemas emocionales y psicológicos. Esto incluye escapar del estrés, la ansiedad, la depresión y el aislamiento social. 

La hipersexualidad también puede ser un síntoma de algunas enfermedades mentales, como el trastorno bipolar. También se sabe que los trastornos neurológicos como la epilepsia, las lesiones en la cabeza y la demencia causan comportamientos hipersexuales. En casos raros, algunos medicamentos que afectan la dopamina pueden hacer lo mismo.

¿Soy adicto al sexo?

Para obtener una respuesta, lo mejor es consultar con un profesional de la salud para una evaluación adecuada de su adicción al sexo, sin embargo, también es posible que desee estar atento a los siguientes signos:

  • Te sientes impotente sobre cómo actúas sexualmente.
  • Tus elecciones sexuales están haciendo que tu vida sea ingobernable.
  • Sientes vergüenza, vergüenza o incluso autodesprecio por tus actos sexuales.
  • Te prometes a ti mismo que cambiarás, pero no cumples esas promesas.
  • Estás tan preocupado por el sexo que se convierte en un ritual para ti.

Es importante comprender que, aunque la adicción al sexo y la pornografía no son diagnosticables “formalmente”, estas condiciones existen y, a menudo, se presentan con consecuencias muy adversas y altos niveles de angustia, culpa y confusión emocional. Si puede relacionarse con los síntomas mencionados anteriormente, o conoce a alguien que cumpla con estos criterios, no dude en pedir ayuda profesional.

¿Cómo se trata la adicción al sexo?

La adicción sexual o hipersexualidad, se trata con una combinación de medicamentos, psicoterapia y terapia grupal de autoayuda.

Medicamentos

Ningún medicamento está específicamente aprobado para tratar la adicción sexual. Sin embargo, se pueden probar medicamentos que actúan sobre las hormonas y sustancias químicas de “urgencia y comportamiento” de su cerebro y que se prescriben para condiciones médicas similares. Su proveedor de atención médica le recetará los medicamentos más adecuados para usted, teniendo en cuenta cualquier otra afección de salud mental que pueda tener.

Psicoterapia

Involucra una variedad de técnicas. Durante la psicoterapia, hablará con un profesional de la salud mental que lo ayudará a identificar y controlar los factores que podrían estar desencadenando sus conductas de hipersexualidad. La psicoterapia se brinda a individuos, así como a familias y parejas, ya que todos se ven afectados por la adicción sexual de un individuo.

Grupos de autoayuda

Estos siguen el modelo del programa de 12 pasos de Alcohólicos Anónimos. Algunos de estos grupos incluyen: sexo anónimo, adictos al sexo anónimos, adictos al sexo y al amor anónimos y compulsivos sexuales anónimos.

Si crees que tienes una adicción al sexo, empiece por hablar con un profesional de la salud mental.