Los mecanismos de defensa psicológicos: Qué son, cuales son y ejemplos

¿qué rol cumple la angustia en la aparición de los mecanismos de defensa?

Según Sigmund Freud a las personas se nos hace difícil ser felices debido a nuestra incapacidad de controlar todos los aspectos de nuestra vida; no podemos controlar la naturaleza, no podemos controlar nuestro envejecimiento y tampoco podemos controlar lo que las demás personas piensan o sienten acerca de nosotros, es ahí donde entran nuestros los mecanismos de defensa psicológicos. Esta serie de incapacidades y la incertidumbre que nos genera son las principales razones de nuestra angustia. Por ejemplo, una madre que deja a su hijo por primera vez en un nido, tendrá una serie de dudas acerca del lugar; pese a que previamente investigo todo acerca del nido y consultó con los demás padres de familia acerca de la calidad de este centro educativo. ¿Por qué pese a todas estas medidas, la madre sigue sintiéndose inquieta acerca de la seguridad de su hijo?

La respuesta está en la experiencia, le causa angustia porque  es la primera vez en la que se ve en una situación así, nunca se había alejado tanto tiempo de su hijo.

Esto empieza a ser un problema cuando utilizamos mecanismos de defensa para amortiguar la tensión que nos puede generar una situación emocionalmente muy intensa.

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¿qué son los mecanismos de defensa?

Los mecanismos de defensa psicológicos son procesos inconscientes de los individuos, tienen la función de proteger el concepto que se tiene sobre uno mismo. Su objetivo es hacer desaparecer o más soportable la angustia causada por una idea o una emoción muy persistente. Se clasifican en:

mecanismos de defensa primarios:

Suelen aparecer en las primeras etapas de la vida y tienden a estar relacionadas a negar la realidad:

Retraimiento:

  • El individuo escapa de la realidad mediante fantasías y sueños para evitar situaciones dolorosas. Por ejemplo: un niño que sufre de violencia en el hogar, duerme constantemente o sólo se centra en sus juguetes o dibujos animados.
    • Negación: El individuo bloquea los eventos negativos o estresantes para no hacerlos parte de su “realidad”. Por ejemplo: Tras la muerte de su padre, una niña lo niega rotundamente, convenciéndose que algún día va regresar.
    • Control omnipotente: La persona llega a creer que nadie ni nada puede influir en su vida o en su voluntad. Por ejemplo: Un niño agarra los juguetes de sus demás compañeros sin su permiso y realmente cree que estos juguetes le pertenecen.
    • Proyección: Es cuando la persona atribuye sus actos, pensamientos o conductas a los demás. Por ejemplo: Luego de insultar a una profesora, una niña se excusa diciendo que ella actúa así porque todos lo hacen, sin embargo a los demás no les dicen nada pero a ella sí, porque le tienen envidia y son malos con ella.
    • Introyección: Es cuando la persona se incorpora dentro de su propio comportamiento, actitudes o pensamientos  de otras personas. Por ejemplo: Juan siente que su hermano recibe más atención de sus padres, por lo tanto Juan empieza a actuar como su hermano.
    • Disociación: Se crea una representación diferente de uno mismo, para así desconectar con la experiencia actual. Por ejemplo: Cada vez que Pedro comete una travesura, se excusa diciendo que en ese momento no era el mismo, sino Juan, un niño que aparece cuando le dan ganas de hacer travesuras.

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MECANISMOS DE DEFENSA SECUNDARIOS:

Suelen aparecer en la adolescencia y adultez, se caracterizan por querer proteger las ideas que tiene la persona sobre la realidad:

Represión

La persona es totalmente consciente de la realidad, sin embargo la “olvida” o la omite. Por ejemplo: Un consumidor de cocaína pese a ser consciente de su problema, suele negarlo y reprime sus conductas ante personas que consideran que van a juzgarlos.

Regresión

De manera inconsciente la persona vuelve a adoptar conductas de su infancia. Por ejemplo: Los días de más carga laboral, Maria suele meterse el dedo en la boca para aligerar la tensión.

Aislamiento

Se separan los pensamientos de las emociones, es decir la persona procesa el hecho pero no su carga emocional, para que de esta manera no pueda afectar. Por ejemplo: Un Policía que mató a un delincuente para proteger la vida de un tercero, afirma que lo hizo porque era su deber, que no tenía otra opción y que no se arrepiente de haberlo hecho.

Intelectuales

La persona entiende su situación y puede llegar a comprenderla sin embargo no puede sentirla. Por ejemplo: Un sobreviviente a un accidente, que narra con lujo de detalle lo sucedido y como se pudo evitar pero no cómo lo afectó directamente a él emocionalmente.

Racionalización

Es cuando la persona justifica ciertos hechos para evitar entrar en conflicto con ellos mismos. Por ejemplo: Cuando una persona que cometió un crimen se excusa diciendo que no tenía otra opción, que su situación era exageradamente complicada y realmente no es una mala persona, solo alguien desesperado.

Anulación

Es cuando la persona compensa un sentimiento o emoción dolorosa con otra que anule el sentimiento de angustia. Por ejemplo: un padre maltratador que luego les lleva juguetes a sus hijos o los lleva de paseo para anular su comportamiento abusivo.

Sublimación

Es el mecanismo de defensa maduro que permite a los individuos canalizar las emociones o pensamientos negativos en otras actividades que resulten más constructivas o beneficiosas para él y los demás.

¿QUÉ TRATAMIENTOS PSICOLÓGICOS RESULTAN MÁS EFICACES PARA TRATAR LOS MECANISMOS DE DEFENSA?

Al ser un concepto psicoanalítico, cualquier terapia derivada de los principios del psicoanálisis puede resultar de gran ayuda para superar este tipo de comportamiento. Sin embargo, cualquier terapia psicológica enfocada a la toma de consciencia de uno mismo puede ser igual de eficaz debido a que los mecanismos de defensa mayormente los usamos de forma inconsciente, si tomamos plena consciencia de nuestros comportamientos, pensamientos y acciones podremos evitar caer en el uso de estos y aceptar la realidad de una forma más asertiva.